La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner afirmó el jueves que no cree que el fiscal Alberto Nisman se suicidara y denunció un complot contra su gobierno.

La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner afirmó el jueves que no cree que el fiscal Alberto Nisman se suicidara y denunció un complot contra su gobierno.

“Estoy convencida de que no se trató de un suicidio”, escribió en una carta publicada en su cuenta de Facebook a propósito de la muerte del fiscal, que acababa de acusarla, así como a su ministro de Exteriores, Hector Timerman, de haber obstaculizado la investigación del atentado contra la organización judía AMIA en Buenos Aires en 1994.

Después de haber evocado un suicidio el martes, la presidenta de centro-izquierda dijo que Nisman ha sido victima de una operación de agentes de los servicios de inteligencia fieles al cesado jefe de dichos servicios, Antonio Stiusso, al que los medios vinculan a la CIA.

Para Kirchner, Nisman fue manipulado y sobre la base de falsas informaciones que le fueron transmitidas, él acusó al gobierno de proteger a Irán en la investigación sobre el atentado de AMIA con el fin de proteger las relaciones comerciales entre los dos países.

Nisman era un conocido pro-israelí que intentó en numerosas ocasiones vincular sin pruebas a Irán del ataque contra el AMIA.

“Ellos lo utilizaron cuando estaba vivo y ahora lo necesitan también muerto. Es triste y terrible”, escribió Fernández.

“No sólo la acusación de Nisman se hunde, sino que constituye un verdadero escándalo político y judicial”, dijo la presidenta, cuyo segundo mandato concluye a finales de 2015.

Según un artículo reciente aparecido en nuestro sitio, Nisman no tenía absolutamente ninguna prueba para justificar su versión que acusaba a Irán y falleció tres horas antes de comparecer ante la Cámara de Representantes, que le iba a pedir cuentas de sus acusaciones contra la presidenta argentina.

“En cada una de sus iniciativas, Nisman fue la marioneta de Israel, que hizo todo lo posible para impedir que el acuerdo  entre Irán y Argentina para colaborar en la investigación del caso diera resultados. Para ello, promovió la creación de obstáculos de tipo jurídico a través delos abogados de la DAIA (Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas)”, señaló el artículo.