Una bomba colocada por extremistas sospechosos mató a dos soldados libaneses e hirió a otros tres el viernes al mediodía cerca de la ciudad de Arsal, en el noreste del país.

Una bomba colocada por extremistas sospechosos mató a dos soldados libaneses e hirió a otros tres el viernes al mediodía cerca de la ciudad de Arsal, en el noreste del país, señalaron medios de prensa y el Ejército.

En la noche del viernes, el Frente al Nusra, vinculado a Al Qaida, anunció también que había decapitado al soldado Mohammed Hamieh.

La Agencia Nacional de Noticias dijo que los atacantes hicieron detonar la bomba alrededor de las 12:15 del mediodía cuando un vehículo militar viajaba por una carretera que unía las áreas de Masaida y Wadi Hamid.

El Ejército respondió bombardeando a los militantes con armas pesadas, señaló la agencia.

Aviones sirios atacaron también las posiciones de los militantes en la frontera, como un gesto de apoyo a su vecino. La agencia no especificó si estos bombardeos aéreos estuvieron vinculados al ataque contra el vehículo militar libanés.

Se trata del primer ataque mortal contra los soldados del Ejército libanés tras una batalla de cinco días que tuvo lugar el pasado mes entre los militares y terroristas del Frente al Nusra y el EI.

El Ejército identificó a los soldados muertos como Ali Ahmed Humeidi al Jarrat, de Sidón, y Mohammed Issam Daher, de Akkar.

El Frente al Nusra anunció también la ejecución de Hamieh citando la supuesta “intransigencia” de las autoridades libanesas.

“Mohammed Hamieh es la primera víctima de la intransigencia del Ejército libanés, que se ha convertido en un títere del partido iraní”, en referencia a Hezbolá.

Hamieh es uno de los 18 soldados y policías tomados como rehenes por el Frente al Nusra en los alrededores de Arsal. El Frente al Nusra había amenazado con matarlo el martes.

El EI ha secuestrado también a otros 10 miembros de las fuerzas de seguridad del Líbano como rehenes y ha decapitado a dos de ellos. Recientemente, se apoderó de otro soldado más.

Los dos grupos terroristas reclaman la liberación de centenares de sus miembros que se hallan en las prisiones libanesas.